Una de las razones por las que nos resulta dolorosa la muerte de quien amamos, es por la cantidad de palabras que quedan sin decirse ; por la infinidad de sentimientos que
hubieramos querido expresarle,pero que nunca nos atrevimos a hacerlo.
Por muchas cosas que queriamos oir que nunca nos dijeron . Por los momentos valiosos que nuestra indiferencia y el tiempo lo llevo. Por las sensibles caricias que se nos quedaron enrredados entre los dedos .¡Que ironia! ,sin embargo cuando
nos encontramos con los vivos callamos, aplazamos, nos reprimimos. Pero
somos nosotros quienes nos disolvemos en nuestras propias brumas...
en los dias no vividos del que ya se fue.
Marty Balin HEARTS Español
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